El Metro de Bogotá será uno de los temas clave sobre la mesa.
Gustavo Petro ya está en Pekín, la capital de China, para desarrollar una agenda en la que destacan tres grandes encuentros. El primero será con el presidente chino, Xi Jinping; el segundo, con el primer ministro, Li Qiand; y el tercero, con el presidente de la Asamblea Popular, Zhao Leji.
Estos son los tres objetivos principales de la visita del presidente Petro a China
Cuando arribó a China, el presidente Petro compartió información sobre los tres puntos clave que tiene previsto tratar en el país asiático. En primer término, expresó su intención de solventar el desequilibrio comercial existente con China.
“Fuera de la importancia que obviamente tiene China en el orden mundial y la buena relación que tiene que construir Colombia alrededor de un mundo cada vez más multipolar (sic), pero en medio de eso, y en forma concreta, el déficit comercial de la balanza de Colombia en general se debe a un déficit con China. Así que superar ese déficit sería una de las mejores políticas económicas que se pudiera hacer en el país”, aseguró Petro.
Acto seguido, el presidente Petro manifestó que espera acordar tiempos respecto a la deuda con China.
”Tenemos, gracias a una muy mala política de endeudamiento en la época del covid, un sobreendeudamiento que podría mejorarse si se mejora el perfil de la deuda en términos de tiempos para el pago. Tenemos una deuda de corto plazo que prácticamente está ahogando las finanzas en estos 3 años y que, si se pone como una deuda de largo plazo, podría disminuir esas afugias que hoy tiene el Presupuesto Nacional”, señaló Petro.
Al final, el presidente Petro explicó: “En tercer lugar, indudablemente, hay un tema a discutir, que aquí, en la República Popular China, se llama la Ruta de la Franja de la Seda. Tiene sus más y sus menos, es una política de construcción de infraestructuras en todo el mundo, pero que en el caso colombiano tiene un capítulo especial y es el vínculo entre el Oceano Pacífico y el Atlántico; pocos países lo tenemos, y eso nos hace prácticamente un puente del comercio mundial, que, más que un puente, podría ser una oportunidad para Colombia en términos del desarrollo de la infraestructura férrea, que hoy es vital”.
Agregó que “Colombia cometió un enorme error al destruir sus ferrocarriles y al pasarse a formas tecnológicas muchísimo más caras e ineficientes. Y, en esa medida, relanzar la red ferroviaria nacional tiene un sentido hoy, si la miramos como el puente comercial entre el Pacífico y el Atlántico”, concluyó el mandatario.
Finalmente, al presidente le preguntaron por el Metro de Bogotá, a lo que respondió que “obviamente, está en el corazón de esa red ferroviaria”.
